Una de las grandes preocupaciones del Real Madrid en los últimos años es la falta de un centrocampista que haga jugar al equipo como lo hacía Toni Kroos o que, al menos, realice sus mismas funciones. Pero poco se habla de la falta de un delantero, de un 9, que haga las funciones de Benzema, o incluso de Joselu. Desde que faltan estas dos piezas, el equipo blanco se ha desmoronado por completo.
Benzema, el olvidado del Real Madrid
El Real Madrid viene de vivir una de las mejores décadas de su historia, posiblemente la mejor de todas, dónde ha sido capaz de ganar seis Champions League, nada más y nada menos. Se habla de las seis Copas de Europa de Modric, de Carvajal, o las cinco de Toni Kroos, pero menos de las 5 de Benzema, un jugador clave en el éxito del equipo blanco.
El futbolista francés tuvo que lidiar con las críticas y le costó mucho ganarse el reconocimiento del Santiago Bernabéu. En su primera etapa se disputaba el puesto con Higuaín, había mucho debate sobre quien tenía que ser titular, pese a que Cristiano Ronaldo nunca ocultó que la presencia del francés le iba mejor a su juego. Cuando el galo se asentó en el once, seguía sin marcar muchos goles, pero fue clave para que el astro portugués batiera todos los récords de la entidad blanca.
Cuando Ronaldo puso punto y final a su aventura madridista, Benzema asumió los galones, su rol de líder, y se ganó al madridismo marcando los goles que no había hecho otros años. Fue ahí cuando la gente descubrió el verdadero potencial del francés en sus botas, el que algunos vieron desde el principio, y su capacidad para asumir el rol que más convenía a la plantilla. Gracias a él, y a una plantilla compensada y con jerarquía, fue clave para la decimocuarta Champions.
El adiós de Benzema
En el verano de 2023, Karim Benzema se marchó, pero dejó un vestuario que contaba con la madurez y la jerarquía de futbolistas que parecían no cansarse de ganar, como Kroos, Modric, Carvajal, o el propio Nacho. Por otro lado, llegó Bellingham, pero lo más importante, pese a que el delantero se había marchado, había un «9» que solucionó la papeleta de los blancos en los momentos clave de la temporada, como fue Joselu. Con ellos, se logró la última Champions League, pero con la salida del alemán, todo acabó por derrumbarse.
La importancia de la columna vertebral de un equipo
El fútbol se ha ido complicando con el paso del tiempo, más táctica, más pizarra…. pero siempre se ha dicho algo que, en el Real Madrid, ahora no se tiene, la necesidad de una columna vertebral estable y fuerte. Un portero, un defensa, un centrocampista y un delantero. Al equipo le falta un delantero, también un centrocampista tipo Kroos, pero, sobre todo, un delantero. Desde que se fue Benzema (y Joselu), y desde la retirada del germano, que era capaz de sujetar al equipo, el ataque blanco se ha hundido. Desde que no existen esas referencias, el juego de Vinicius se ha diluido, ha perdido efectividad, al igual que el de Rodrygo.
Como se vio el pasado martes ante el Liverpool, el ataque del Real Madrid era previsible, y, con una defensa como la del equipo inglés, si la única alternativa es entrar por la banda izquierda, por muy buenos que sean el brasileño y el ex del PSG, serán escasas las opciones.
La presencia de un 9 es clave para fijar a los centrales, generar espacios por banda, dar alternativas en el área, y facilitar la llegada de la segunda línea con opciones de hacer daño. Sin el 9, los centrales rivales pueden ayudar para frenar las individualidades por banda, y pueden estar pendientes de la segunda línea, eliminado por completo las opciones de peligro y sorpresa.
El Real Madrid necesita un cerebro, un futbolista que entienda el juego, que marque el ritmo de sus compañeros, que ayude a la salida de balón, pero también necesita un referente en la punta del ataque, una futbolista que fije defensas, que permita generar espacios, de tal forma que liberes a las individualidades para que tengan más opciones. Ni siquiera hace falta que meta goles, Benzema al principio no los metía, se los dejaba a Cristiano Ronaldo, al igual que ahora los puede seguir metiendo Mbappé.
