La clasificación de Brasil en Sao Paulo estuvo repleta de emoción desde el inicio, aunque Carlos Sainz habría preferido terminar un poco más adelante. El madrileño, acusado desde el viernes por falta rodaje en Interlagos, ha concluido este sábado en 15º lugar para la carrera del domingo.
Carlos Sainz afronta un fin de semana cargado de debilidades en Brasil
Porque sí; más allá de que la gran sorpresa de la sesión fue la eliminación de Max Verstappen en la Q1 con el 16º peor tiempo, la Q2 y Q3 no hubo grandes sorpresas pese a las eliminaciones de Fernando Alonso y Hamilton. Pero ni por esas el madrileño pudo mejorar su único tiempo y se tuvo que conformar con ser el último de la segunda manga.
De hecho, el de Williams no completó siquiera su último giro. Y lo hizo viviendo una jornada complicada. Sobre todo porque el español no consiguió encontrar ritmo en ningún momento con los neumáticos blandos, y eso lo condenó a una posición muy lejana a las expectativas.
Tampoco completó su intento en la Q2 al comprobar en los parciales que no mejoraba lo suficiente. La decisión fue clara: ahorrar neumáticos y asumir que partiría desde la 15ª posición en la parrilla del domingo, un golpe duro en un fin de semana donde el equipo de Grove, vestido con los colores míticos de Gulf, esperaba algo más competitivo. Su compañero de garaje, Alex Albon, corrió su misma suerte, y saldrá desde la 12º, tres puestos por delante que Sainz.
Falta de tracción, falta de ritmo, malos ajustes de setup…
Y no por nada el Williams volvió a mostrar las mismas debilidades que ya habían aparecido en México: inconsistencia en el paso por curva y una falta de tracción evidente cuando el coche va cargado. Mientras Albon casi logró salvar los muebles con una vuelta más limpia, incluso en la carrera al sprint de unas horas, Sainz se quedó sin opciones desde el primer intento. «No teníamos el ritmo con el blando, simplemente no íbamos”, resumía el piloto español en la zona mixta donde GRADA3 está presente, consciente de que el margen era mínimo y de que el coche no le ofrecía confianza.
La sesión fue especialmente exigente por las condiciones cambiantes del asfalto y el viento, que complicaron la gestión del agarre. Sainz intentó ajustar su vuelta hasta el final, pero el FW47 no respondió. En el garaje ya reconocen que Brasil es uno de esos circuitos donde las debilidades del coche se amplifican: la humedad, las curvas lentas y los cambios de elevación castigan el equilibrio aerodinámico.
«No parece que el coche tuviera ritmo para pasar», señala Carlos Sainz
Así lo explicaba Carlos Sainz tras bajarse del coche. «Hicimos un rendimiento mucho más bajo de lo que pensábamos, e intentamos hacer un cambio de dirección en el setup. Vimos que no funcionaba, luego volvimos y fuimos a otra dirección. Probablemente quedamos un poco perdidos», dijo.
Aun así, el madrileño cree que podría haber estado algo más cerca de la Q3, aunque sin opciones reales de alcanzarla. «Si lo miro fríamente, cuando ves a Alex, no parece que el coche tuviera ritmo para pasar. Fue un día muy raro, muy extraño. Algo no ha estado funcionando bien”.
Hablamos, además, de que el circuito de Interlagos expone muchas debilidades del Williams en curva lenta. Desde que se subió al coche el viernes, todo ha ido a contrapié para el madrileño. O lo que es lo mismo; aquí, el Williams no tiene el rendimiento que tuvo en los circuitos anteriores y eso se nota.
Algo no funciona bien en el Williams este fin de semana
Desde el viernes, todo ha ido a contrapié para Sainz. Interlagos ha vuelto a dejar en evidencia las debilidades del Williams en curva lenta y la falta de tracción en salidas. «Necesito probar cosas para ayudar al equipo a entender por qué estamos sufriendo con este setup”, explicaba. Aun así, asegura que no está preocupado: “Son los mismos problemas de siempre”.
Por último, lo confía todo a una buena estrategia desde el muro que pueda lanzarles. Especialmente teniendo en cuenta que Brasil ha dejado ya varias sorpresas en estos dos días. «Probablemente la estrategia sea nuestra mejor oportunidad para enfocarnos y ver qué podemos hacer… Incluso si no llueve mañana. Por si fuera poco, Carlos Sainz arrastra un malestar desde el jueves. Físicamente no estoy bien, pero he demostrado que podía hacer una buena vuelta, una vuelta rápida hoy, pero no hemos puesto en una posición en la que no hemos podido completar una vuelta rápida», sentenció.
Y así, Carlos Sainz solo pudo ser 15º en un fin de semana complicado para el madrileño, que empezó con una indisposición el jueves y un error del equipo en la clasificación sprint del viernes. Tras usar el sprint de experimento para los reglajes, Sainz fue 15º y su compañero, Albon, 12º.
