David Alaba y Austria se citan con su historia. Este martes 18 de noviembre a las 20:45 (hora peninsular), el combinado austríaco se juega su clasificación en el próximo Mundial contra Bosnia y Herzegovina. Es un todo o nada. El ‘Wunderteam’ es líder del Grupo H. Sin embargo, los bosnios les siguen de muy cerca: sólo dos puntos separan las dos selecciones. En Viena, Alaba y sus compañeros podrán contar con el aliento de su público para sellar su pase a la Copa del Mundo. Un empate sirve para volar hacia el continente americano el próximo verano.
Tanto Austria como Bosnia y Herzegovina llegan con posibilidades de clasificarse para el Mundial. En Chipre, los austríacos derrotaron a los chipriotas con una victoria sin tapujos (0-2). Por parte de los bosnios, los ánimos también están subidos, aunque estuvieron a punto de ‘auto eliminarse’ de la carrera por la Copa del Mundo. Ante Rumanía, el combinado dirigido por Sergej Barbarez empezó perdiendo. Sin embargo, en la segunda mitad los locales lograron darle la vuelta al marcador (3-1), gracias a la expulsión de Denis Dragus, apenas dos minutos después de ingresar al terreno de juego. Un escenario completamente surrealista que dejó a Bosnia viva para su visita a Viena.
Austria quiere volver a un Mundial
Hace 28 años que Austria sueña con una Copa del Mundo. Su última participación mundialista remonta a 1998. Casi tres décadas y seis Mundiales después, el ‘Wunderteam’ vuelve a tener una bala. En tierras austriacas, la tensión es palpable, aunque todos confían. Según una encuesta realizada por el diario Heute, el 74% de sus lectores confían en que su selección se clasificará para el Mundial. Anton Polster, leyenda del ‘Das Team’, también muestra optimismo: «Somos mucho mejores«.
Dentro del combinado austríaco, nadie se ve como clasificado todavía. Marko Arnautovic se mostró muy cauteloso y, aunque ‘Das Team’ juega en casa, no considera que su país sea el «favorito». «No diría que lo somos (los favoritos). Nos enfrentamos a un equipo joven y peligroso con mucha calidad«, explicó el delantero del Estrella Roja de Belgrado.
Pero Ralf Rangnick tiene un amuleto, y contará con él. Según aporta el periódico austríaco Kronen Zeitung, la selección de Austria lleva diez partidos consecutivos sin perder en sus tierras. Desde el 21 de noviembre de 2023 –victoria 2-0 contra Alemania–, el ‘Wunderteam’ no ha sabido perder: suma ocho victorias y dos empates. Además, tal y como comenta este mismo medio, sus estadios son un fortín: marcaron 34 goles y apenas sufrieron seis. El camino está trazado, ahora sólo falta no desviarse de él.
Alaba sigue siendo duda
Eso sí, todavía se desconoce si David Alaba jugará el partido decisivo contra Bosnia y Herzegovina. El central sigue tocado y es duda para el choque. No jugó contra Chipre por una acumulación de tarjetas amarillas, pero tampoco podría haberlo hecho por su percance musuclar. En la sesión del lunes, el zaguero del Real Madrid se entrenó con el grupo por «petición propia», según comentó Rangnick en la rueda de prensa previa al choque. Eso sí, el seleccionador austríaco recalcó que, hasta el último momento, David será duda. Si está para saltar al verde, no lo hará de inicio: «Todavía tenemos que decidir si incluiremos a David en la convocatoria. Desde luego, no será titular«.
Bereit für morgen! Noch einmal alles reinhaun! 💪🏻🇦🇹 #GemeinsamÖSTERREICH pic.twitter.com/SkqlwtWdsN
— ÖFB – oefb.at (@oefb1904) November 17, 2025
David Alaba quiere hacer ir al Mundial. Es su sueño. Todavía no ha jugado ninguno y, con 33 años bien cumplidos, el central está ante su última bala para formar parte de una Copa del Mundo. Desde su entorno transmiten que sería maravilloso que pueda disfrutar de ello. Austria ha sido su escapatoria en su último año en el Real Madrid y quiere devolver esa alegría a su país. Pero antes, habrá que derrotar a Bosnia y Herzegovina. Sino, al playoff.