Eduardo Camavinga su juega su futuro, ya no solo en el Real Madrid, también en la Selección Francesa. El futbolista galo reapareció hace unas semanas tras estar cuatro meses de baja, y tras varios partidos, deja sensaciones encontradas, parecidas a las del año pasado, igual te protagoniza grandes actuaciones, y al día siguiente comete errores de principiantes. En el club, se le mira con lupa, es el momento de que dé un paso al frente.
Camavinga y su vuelta con el Real Madrid
Tras una mala temporada, marcada por las lesiones, por los problemas físicos, y por una falta de continuidad que le impidió rendir como se esperaba, Camavinga ha regresado al equipo tras la dura lesión sufrida al final del curso pasado. Lo hizo a finales del mes de septiembre, pero no fue hasta mediado de octubre cuando comenzó a tener protagonismo.
Y comenzó con mucha fuerza, destacando, sobre todo, en la victoria del Real Madrid ante el Barcelona, un examen que pasó con nota y que, además, generó muchas expectativas. Xabi Alonso le ha dado la confianza que necesita un jugador como él para volver a adaptarse y para lar los pasos que necesita. Sin embargo, desde aquel partido, vuelta a las andadas. Actuaciones correctas, unas más que otras, sin mucho brillo, hasta que llegó el día del Liverpool, con un Xabi Alonso que repitió once del Barcelona, pero con un rendimiento completamente distinto, de todos, pero también de Camavinga.
Y el último partido, ante el Rayo Vallecano, tuvo la gran prueba, porque le tocó suplir a Tchouaméni, pero no cumplió. De hecho, Xabi Alonso, antes de sustituirlo en la segunda parte, le volvió a poner en la derecha, renunciado a tener un mediocentro defensivo, porque más que sumar, restaba.
Dudas con Camavinga
Camavinga sigue siendo muy joven, pero lleva cinco años en el Real Madrid, y en el club, creen que ya va siendo hora de que dé un paso más en su carrera, que demuestre si, realmente, tiene pasta para ser jugador del equipo. Porque la idea, cuando se le fichó, no es la de que fuera un suplente, se le fichó para que fuera progresando y se hiciera con un puesto titular en el centro del campo, y eso, por el momento, se antoja complicado.
Esta debe ser la temporada en la que dé un paso al frente, se está jugando su futuro. De cara al Mundial, parece un fijo, pero a ver qué pasa. Pero en el Real Madrid, su continuidad no está asegurada: es un jugador por el que se puede sacar un buen beneficio económico, y el club podría buscar alternativas para la próxima temporada, si no mejora su nivel. De momento, tiene crédito, pero se le esta acabando. Xabi Alonso confía en él, por sus capacidades, por su juego, por su físico… pero también porque no tiene muchas más alternativas. Tiene pocas piezas en el centro del campo, en el aspecto defensivo, así que no le queda otra que apostar por el futbolista, eso sí, porque capacidades tiene, otra cosa es que, por un motivo u otro, no pueda lucirlas.
Camavinga tiene mucho que hacer, y poco tiempo para demostrar, porque lleva demasiadas temporadas en el Real Madrid, y aunque sigue siendo joven, aunque le queda mucho margen de mejora, en el club blanco llega un momento en que, o cumples, o te quedas fuera. Se le ha estado esperando, se le sigue esperando, pero, si no da el paso que tiene quedar, se tendrá que marchar, e incluso, podría quedarse sin Mundial