Losail.– Renovar su contrato con Alpine le ha cambiado la vida a Franco Colapinto, que pilotará al lado de Pierre Gasly en 2026 con un monoplaza más competitivo que el de este año. El argentino tiene ganas de terminar la temporada y de pilotar un coche que pueda pelear por algo decente y no por las últimas posiciones de la parrilla. Solo le quedan dos carreras con el A525. Mientras, con la renovación anunciada en Brasil hace dos carreras, reconoce, desde el paddock de Losail, sentirse «más relajado» desde entonces.
«Sí, estoy más relajado tras el anuncio y muy emocionado por 2026. Especialmente, por tener un año normal empezando con test y poder trabajar con un coche desde cero es muy bueno. Es muy diferente a lo que estoy acostumbrado, que es llegar en medio de la temporada sin saber muchas cosas y sin estar encima de muchas de las cosas desde el comienzo del año. Creo que va a ser muy útil, estoy muy emocionado por tener ese lujo. Estoy muy emocionado por 2026, creo que el coche se ve más competitivo y cuando puedes competir un poco más arriba, es mejor para el piloto. Creemos que va a ser un mejor año en términos de performance y que tendremos más oportunidades así que intentaremos maximizar esta última parte del año para prepararnos bien para 2026″.
¿Qué hay de sus rivales para el año que viene? ¿Dónde estará cada equipo? Colapinto sabe que su coche tendrá motor Mercedes y solo piensa en lo que será capaz de poner en pista Alpine: «Nos centramos en nosotros mismos, solamente en arreglar todos los problemas que tuvimos este año. La parte principal es que sabemos que muchos de nuestros problemas se arreglarán con el coche del próximo año y que hemos estado trabajando en las áreas específicas del coche que han sido un fracaso. Saber que hemos mejorado y eso me da bastante confianza de que vamos a ser más fuertes. Hay muchos cambios y los chicos en la oficina han estado trabajando mucho, así que sí, creo que se ve positivo».
Su mejor y peor carrera
El argentino, que no ha podido sumar ningún punto todavía en 2025, se mostró muy optimista de cara al año que viene. «Tenemos que ver dónde están nuestros rivales pero de nuestro lado hemos hecho lo mejor posible. Y, de hecho, hemos aprendido mucho de nuestros coches anteriores para entender en qué dirección debíamos ir. Es muy diferente trabajar sabiendo que puedo estar otro año con el equipo y que tenemos este momento para aprender y prepararnos mejor. Creo que todo el equipo está trabajando para entender cómo ayudarme y lo que necesito del coche para el próximo año. Eso me ayudará mucho. Así que sí, estoy feliz. Creo que la mejor parte es poder trabajar con las mismas personas y eso realmente ayuda a prepararme mucho mejor el año».
El pilarense fue preguntado por su mejor y peor carrera en su primera temporada con Alpine, a falta de dos pruebas para cerrar el año. Se subió al coche en Imola y tardó un rato, pensativo, en elaborar su respuesta: «La peor… diría que probablemente Barcelona, me estaba costando mucho en ese momento. Y mi mejor creo que fue alrededor de Holanda, en esas carreras me sentí muy fuerte y muy confiado con el coche. Me sentí mucho mejor y ese fue el momento en que cambió un poco el año. Fue cuando empecé a sentirme mucho mejor, más consistente y empecé a sentirme más confiado con el coche que necesitaba. Así que ha sido un poco arriba y abajo el año en general todo este año».