sábado, diciembre 13, 2025
Grada3
  • Real Madrid
  • FC Barcelona
  • Atlético de Madrid
  • Fórmula 1
  • Fútbol
    • Champions League
    • Europa League
    • Copa Del Rey
    • Fichajes
  • Tenis
Grada3 logo
Cambio Bernabéu

Florencia Tan Jun/Getty Images

La transformación del Santiago Bernabéu: así ha cambiado la afición

Los pitos volvieron al Bernabéu

Javier F.Por Javier F.
13/12/2025 08:00

Últimas noticias

Lo que le viene al Real Madrid para salir de la UCI

La séptima victoria consecutiva del Barça pasa por Osasuna

El Santiago Bernabéu ha cambiado por completo en los últimos años, y aunque lo más visible sea como ha evolucionado su estructura, su exterior, su interior, los marcadores, las zonas vip… hay un elemento que ha sufrido una enorme transformación a lo largo de los años, de la que se habla poco, pero evidente para quienes llevan toda su vida pisando el estadio, el público y su permisividad con sus jugadores. Muchas cosas han cambiado en los últimos años, y los futbolistas actuales son los que más se están beneficiando de ello.

Un público exigente, pero ya no tanto

El público del Santiago Bernabéu se ha caracterizado históricamente por su exigencia, por pedir siempre más a sus jugadores, por no conformarse simplemente con una buena actitud de sus futbolistas, eso siempre se daba por hecho en un jugador que se enfundaba la elástica blanca, y cuando un futbolista no cumplía, no rendía, el estadio se lo hacía ver. Y cuando era el equipo en conjunto, la pitada se escucha a kilómetros del templo blanco. Esa es la exigencia de un club que su objetivo no es luchar por todo, es ganarlo todo, la exigencia de un público que ha visto en su estadio al mejor club de la historia.

Los más viejos del lugar cuentan que cuando eran jóvenes, no iban a ver si ganaba el Real Madrid, iban a ver por cuánto ganaba el Real Madrid. No se permitía que el equipo se dejara puntos en casa, y menos con rivales de menor entidad. Siempre conscientes de que esto es fútbol, era obligatorio darlo todo en cada partido para amarrar la victoria por encima de todo, y si es con buen juego, mucho mejor, pero solo importa ganar.

Pero tampoco tenemos que irnos muy lejos para recordar la exigencia y la presión que ejercía el público del Santiago Bernabéu en sus jugadores. En este siglo, este estadio ha cuestionado a Raúl, emblema y leyenda blanca, a Zidane, o, sin ir más lejos, Cristiano Ronaldo ha visto como el estadio se le echaba encima al equipo, después de que se clasificaran para los cuartos de Champions League. Fue en 2015, tras una actuación lamentable de los blancos, y el astro portugués, autor de un doblete clave para la clasificación, fue el primero en aceptar la respuesta de un público decepcionado con sus jugadores. Eso parece impensable a día de hoy.

La reacción del Santiago Bernabéu

El Real Madrid vive uno de los peores momentos de los últimos años, mucho peor momento que aquel de 2015, pero las reacciones del Bernabéu son completamente diferentes. Pese a haber perdido 9 puntos en un mes, haber pasado de ser líderes con cinco puntos de ventaja a ser segundos cuatro puntos por detrás del Barcelona, pese a ver cómo se siguen perdiendo partidos contra equipos grandes, después de ver una fracción entre los jugadores y el cuerpo técnico, el público blanco, ya no dicta sentencia.

No hay más que ver la reacción ante el Manchester City. Con el equipo perdiendo, a falta de 25 minutos, parte del público, los pocos que quedan de toda la vida, no pudieron más y comenzaron a pitar al equipo, pitidos leves, que nadie vaya a pensar que eso resonó como pasaba antes. Fue suficiente para que unos futbolistas acomodados y que parecen haber olvidado lo que significa vestir la camiseta del Real Madrid, reaccionaran. Y esos que pitaron, fueron los que, viendo la reacción del equipo, se sumaron a la grada joven para intentar llevar el partido a un simple empate.

Y esa quizá sea la lectura más triste, que ni lográndose, algunos aficionados salían contentos del estadio porque habían visto un cambio de actitud, porque habían visto que el equipo lo había intentado. Viendo de donde venía la plantilla en el último mes, una derrota con orgullo parece ser suficiente para algunos, parece ser suficiente para un Santiago Bernabéu que en los últimos años solo ha esperado al tramo final de temporada para llevar en volandas a su equipo, pero que ha perdido la esencia de lo que ha sido este club en toda su historia.

¿Qué ha cambiado en el Santiago Bernabéu?

El fútbol contemporáneo, el del siglo XXI, es completamente diferente a lo que era el fútbol hace unos años. Y uno de los equipos responsables de esos cambios en el propio Real Madrid. Hasta hace bien poco, el fútbol, el Santiago Bernabéu, era un estadio accesible, un estadio para la gente de la ciudad, para los madridistas de toda la vida. Entrar en el feudo blanco nunca ha sido barato, pero si estaba al alcance de las familias, mucha gente podría permitirse ir al estadio una o dos veces al año, era gente de fútbol, gente de club, forofos de su equipo, que solo tenían esa oportunidad de ver a su equipo, porque por entones solo había radio, y claro, si los futbolistas no se dejaban lo que había que dejarse, la pitada era descomunal.

Como todo en la vida, la mayoría de cambios tiene un objetivos y cambios positivos, pero también trae cosas malas, y eso es lo que ha sucedido al equipo con su estadio (uno de los más espectaculares del mundo, sin duda). El fútbol moderno, el modelo actual, tuvo sus inicios precisamente en el Real Madrid de Los Galácticos. Florentino Pérez supo transformar un club de fútbol en un generador de dinero y de glamour por todo el mundo, un modelo que fueron copiando otros grandes clubes y que hoy está más que asentado en todo el planeta. Eso trajo mucho dinero, mucha inversión, y ha catapultó al club blanco a vivir una de las décadas más exitosas de la historia en lo deportivo, pero también ha transformado al público del fútbol, al público que va al Santiago Bernabéu.

El Santiago Bernabéu se ha convertido en un lugar exclusivo, un lugar donde todos quieren ir, pero muy pocos pueden entrar, dominado por empresas y ocupado por un público que viene de todo el mundo, un público que, nadie duda de su madridismo, pero que nada tiene que ver con esa gente que iba antes al estadio. Esta gente, no solo no va a pitar en el Santiago Bernabéu, ni siquiera sabe por qué se pita ni sabe cuándo el equipo merece recibir tal castigo.

Un público que debe pronunciarse

Por suerte, todavía queda mucha gente en el estadio de los de toda la vida, muchos abonados que están dispuestos a llamar la atención de sus jugadores, pero cada vez son menos, y cada vez se cortan más. Ayer ante el Manchester City no pudieron aguantar más, y volvieron a pitar. La última vez que lo habían hecho por contra Tchouaméni la temporada pasada, y cosas del fútbol, desde entonces, el nivel del francés es el más elevado desde que llegó al equipo.

Estos futbolistas, más conectados que nunca, viven ajenos al ruido externo, y la mejor manera de que se den cuenta de que hay gente cansados de ellos, es recibiendo la pitada del Santiago Bernabéu, porque eso sí que da que pensar, eso sí que genera reacciones. Son muchos los que dicen que pitar no sirve para nada, pero de vez en cuando, parece necesario que se les recuerde a algunos jugadores que están en el club más importante de la historia, y que son ellos los que tienen que estar agradecidos, y no al revés.

Artículos relacionados

La séptima victoria consecutiva del Barça pasa por Osasuna

La transformación del Santiago Bernabéu: así ha cambiado la afición

El ‘9’ que necesita el Real Madrid se llama Gonzalo García

Posible alineación del FC Barcelona ante Osasuna en LaLiga: con todo para seguir en racha

Esto es lo que le costaría al Real Madrid despedir a Xabi Alonso

  • Contacto
  • Quiénes somos – Historia y equipo de Grada3.COM
  • Aviso legal y política de privacidad y cookies​

© 2025 Grada3.com - El fútbol, de otra manera

  • Real Madrid
  • FC Barcelona
  • Atlético de Madrid
  • Fórmula 1
  • Fútbol
    • Champions League
    • Europa League
    • Copa Del Rey
    • Fichajes
  • Tenis

© 2025 Grada3.com - El fútbol, de otra manera