El FC Barcelona quería consolidar su gran dinámica y su liderato con un triunfo ante Osasuna que dejase al Real Madrid, que juega el domingo, a 7 puntos. Los de Hansi Flick llegaban al último partido del año en el Camp Nou lanzados y con hambre de más y así lo demostraron buscando una y otra vez el gol ante un conjunto rojillo que aguantó el primer acto, pero se encontró con un Raphinha que con un doblete sentenció el partido.
Inicio igualado
El partido comenzó en el Camp Nou con el Barça tratando de encontrar el camino al gol y atento en defensa para que no le sucediese lo mismo que en anteriores encuentros donde acabó encajando y viéndose obligado a la remontada. Lo intentó Ferran e incluso Koundé y Rashford pedía penalti en un área en la que no encontraba hueco Lamine Yamal. La más clara de los primeros compases del duelo para los azulgrana la tendría el Tiburón. Lamine se inventó un centro cerrado muy peligroso y el delantero llegó a tocarla, pero el remate se marchó ligeramente alto.
No se quedó atrás Osasuna que trató de replicar con un Budimir muy solo arriba. Moncayola sacó directamente al área, Torró peinó y el delantero intentó girar como pudo y no le dio fuerza. Se la quedo Joan. Casi a renglón seguido tuvo otra el delantero rojillo vinculado con el Real Madrid el pasado verano. Arguibide se la dio en ventaja y buscó el lanzamiento de primeras, pero le salió completamente al centro. Comenzaba animarse el partido en el Camp Nou tras 20 minutos de juego y también Pedri se animaba desde la frontal, pero envió el esférico directamente a las manos de Herrera.
Con el 0-0 al descanso
Tanto se animó el partido que acabó llegando el primer tanto de tarde y no podía ser de otro que el killer Ferran Torres. Osasuna estaba saliendo y justo el Barça puso un centro para que el Tiburón la cruzara de cabeza. Sin embargo, acabaría siendo anulado por fuera de juego y no subiría al marcador. El Barça buscaba los disparos lejanos ante la falta de espacios que dejaban los de Lisci que estaban aguantando bien y pudieron ponerse por delante en el marcador.
Y es que a la media hora de juego Víctor Muñoz rompió la defensa culé en velocidad y Joan García cerró el hueco a Budimir en el uno contra uno aunque había fuera de juego en el momento del pase. No dejaron los culés de buscarlo, hasta de chilena, y al descanso se fueron con una triple ocasión. Herrera despejó el tiro de Lamine, Raphinha le pegó al aire y Ferran se quedó muy cerca.
Raphinha derribó el muro
Más de lo mismo en el segundo acto con Barça y Osasuna buscando un tanto que se resistía en el Camp Nou hasta que apareció el de siempre, Raphinha. El brasileño aprovechó una de las pocas transiciones que del partido para correr por el carril central. Escondió muy bien la dirección y puso un disparo cruzado al que no pudo llegar Sergio Herrera. No se conformaba el Barça con el 1-0. El asedio azulgrana era constante y no conseguía Osasuna salir.
La alegría pudo durar poco, pero lo cierto es que en el Camp Nou se pasó del posible 1-1 al 2-0. Se tropezó y derribó a Joan, que despejó mal y marcó Herrando. Se anuló el gol de Osasuna por falta sobre Joan y acto seguido Raphinha sentenció el partido llegando en el segundo palo y aprovechando un rechace. Con un doblete del brasileño que vuelve a ser diferencial el Barça mantiene su racha, se asienta en el liderato y mete presión a un Real Madrid que se queda a 7 puntos.