Federico Valverde es más lateral que centrocampista. Era un secreto a voces, pero ahora se va confirmando poco a poco. El segundo capitán del Real Madrid ha vuelto a ser el elegido ante el Deportivo Alavés para cubrir el costado derecho. Ante las bajas de Trent Alexander-Arnold y Dani Carvajal, el uruguayo siempre ha sido la solución de Xabi Alonso, aunque Raúl Asencio también lo fue. Sin embargo, en Mendizorroza, Fede jugó en los dos carrileros. Empezó por la derecha y recayó en el zurdo cuando Víctor Valdepeñas fue sustituido. Allí también, ningún futbolistas –salvo el canterano– estaba disponible. Por ende, el ‘8’ volvió a sacrificarse. Y, poco a poco, le va cogiendo ritmo y gustillo.
Contra el Deportivo Alavés, volvió a lucirse. Federico Valverde volvió a demostrar que su polivalencia no tiene límites… cuando se anima. Nuevamente lateral derecho, el capitán cumplió con creces. En defensa, Valverde ganó el 75% de las entradas que intentó (3/4), además de registrar dos intercepciones, dos despejes y tres recuperaciones. Su producción en los duelos en el suelo (5/6, 83%) también fue clave para sostener el bloque blanco ante las transiciones del Alavés. Con balón, el uruguayo alternó precisión y verticalidad. Algo habitual en él. Completó el 74% de sus pases (32/43 pases), destacando una enorme fiabilidad en campo propio (95% de acierto), aunque con algo más de riesgo en campo contrario (55%), donde buscó constantemente conectar con Kylian Mbappé y los extremos. Además, rozó el gol con uno de sus característicos disparos lejanos, recordando su habitual amenaza desde fuera del área.
Federico Valverde es más lateral que centrocampista
De los 22 partidos que ha disputado Federico Valverde esta temporada, el uruguayo sumó 20 titularidades. Pues, de esos 20 encuentros salidos de inicio, el segundo capitán del Real Madrid cosechó ya nueve titularidades como lateral derecho. De hecho, es el jugador que más tiempo ha pasado en dicha posición. De los 1.834 minutos que ha disputado hasta ahora, ‘El Pajarito’ recopila 785 minutos en el puesto de carrilero derecho, contra 779′ de mediocampista.
Esta temporada, Federico Valverde está siendo uno de los talismanes de Xabi Alonso. No solo por su estatuto de capitán, que también, sino por la versatilidad que ha podido ofrecer el uruguayo a través de los diferentes partidos. En total, ‘El Pajarito’ ha jugado en cinco posiciones distintas: lateral derecho, centrocampista, extremo derecho, interior derecho… y ahora lateral izquierdo. Su puesto de predilección es estar en la sala de máquinas, en un rol más céntrico, en la construcción del juego. Sin embargo, desde pronto en la temporada, a Xabi Alonso no le convencía ver al sudamericano en la medular. Prefiere jugar con Tchouaméni, Güler, Bellingham e incluso con Eduardo Camavinga cuando está disponible. Por ende, Fede tuvo que sacrificarse… y al principio, no le gustó para nada.
«No nací para jugar de lateral»
Porque después de empezar como centrocampista, Federico Valverde tuvo que empezar a cubrir las bajas de Trent Alexander-Arnold y de Dani Carvajal. Los dos ya han sufrido dos lesiones esta temporada y no se les volverá a ver hasta 2026. Por parte del nativo de Leganés, llegará a principios de enero. El inglés reaparecerá en febrero. Entonces, Fede deberá seguir cumpliendo con ese papel. Algo que hace desde septiembre… pero que a él no le convencía del todo.
Después del encuentro contra el Marsella, lo dejó claro. «Quiero seguir en el medio, que es mi posición, aprendí de Kroos, Modric, Casemiro… no me gusta mucho jugar de lateral, el entrenador siempre lo sabe, pero siempre estoy dispuesto de ayudar al equipo sea donde sea», explicó. Y ante el Kairat Almaty, volvió a la carga. «Uno siempre escucha o ve críticas. No nací para jugar de lateral. Tampoco crecí en esa posición. Estuve ahí en esa posición. Siempre tuve la duda que, a lo mejor, tuve suerte en esos partidos que lo hice bien. Me sentí muy cómodo en esos partidos. Me tocó jugar de extremo y gané una Champions. En el medio y de lateral, igual. Siempre estoy a disposición. Sí que es cierto que no me siento cómodo. Intento mostrar actitud y por eso las cosas me van bien. Crecí en el medio, aprendí mucho ahí. Pero de lateral me ha ido bien, y estoy para lo que necesite el entrenador«.
Un ‘mea culpa’…
Unas declaraciones que encendieron al madridismo, y no en el buen sentido. Porque además, en Kazajistán, el segundo capitán del Real Madrid se quedó en el banquillo y no calentó antes del pitido inicial. Durante el encuentro, salió a hacer unos ejercicios, aunque brevemente. Aunque Xabi Alonso explicó que la decisión de su suplencia «ya era tomada», la mala imagen que transmitió el uruguayo provocó la furia de la afición.
Tanto que el propio Federico Valverde tuvo que pedir públicamente disculpas. «He leído varios artículos dañando mi persona. Sé que he tenido partidos malos, soy consciente. No me escondo y doy la cara. Realmente estoy triste. De mí pueden decir muchas cosas, pero bajo ningún punto de vista pueden decir que me niego a jugar. He dado todo y más por este club, he jugado fracturado, lesionado y jamás me he quejado ni he pedido un descanso. Tengo una buena relación con el entrenador la cual me hace sentir con la confianza de poder decirle cuál es la posición que más me gusta dentro del campo, pero siempre, siempre le hice saber que estoy disponible para cumplir en cualquier lugar, en cualquier viaje y en todos los partidos Deje el alma en este club y lo seguiré haciendo, aunque a veces no alcance o no esté jugando como quisiera, lo juro por mi orgullo que jamás me rendiré y lucharé hasta el final jugando donde sea«, escribió el capitán en X (antiguamente Twitter).
… y a seguir
Y desde entonces, todo ha ido a mejor para él. Asumió poco a poco su nueva posición y de hecho, lo hacía mejor que en el centro del campo. Se rumoreaban también tensiones con Xabi Alonso, pero después de Olympiacos, Fede regateó la polémica: «Después de una semana en la que se dijeron muchas cosas, nosotros estamos más unidos que nunca (…) En lo personal estoy trabajando para volver a mi mejor nivel. El míster siempre ha estado a mi lado, apoyando y haciendo todo lo posible para que siga creciendo y ayudando al equipo. No siempre es fácil, pero el cuerpo técnico y los jugadores estamos más unidos que nunca«. Día tras día, Valverde va entendiendo su nuevo rol en el Real Madrid. La directiva y sus compañeros le apoyan. Le cuesta, pero es el capitán. Debe hacerlo. No tiene elección.
