Carlos Sainz se obligado a abandonar en la carrera de Austin, en el Gran Premio de Estados Unidos antes de lo previsto, tras un toque con el joven Kimi Antonelli que dejó su Williams fuera de combate.
Carlos Sainz, obligado a abandonar en Austin
El incidente ocurrió mientras Antonelli intentaba una maniobra de adelantamiento. El italiano de Mercedes buscó el interior de la curva, y en ese momento ambos coches se tocaron. El golpe afectó al monoplaza de Carlos Sainz, que sufrió daños irreparables y tuvo que retirarse apenas unas vueltas después.
Para Sainz, la retirada fue especialmente dolorosa después de haber tenido un buen sábado. Y es que en la carrera sprint logró subir al podio, y en la clasificación para la prueba principal había logrado meterse en el top 10 con un monoplaza que no es de los más rápidos los domingos. El abandono deja una sensación amargamente ganada: mota de esperanza apagada antes de tiempo.
Ha llegado a ir más rápido que Antonelli, y cuando ha intentado adelantarlo, en el mismo punto que a Bearman, se ha producido un toque entre ambos. Carlos ha ido a por todas, pero esta vez no ha sido suficiente para colocar todo el coche por delante del Mercedes de Antonelli.
Sainz podría haber peleado por algún punto, pero se encontró con Antonelli
En sus primeras declaraciones tras bajarse del coche, Carlos Sainz reconoció en Austin que estaba “muy frustrado” por lo sucedido. A pesar de haber conseguido una buena posición en parrilla, no pudo demostrarlo en la pista. Muchos creían que, con su ritmo de carrera, aún podría haber peleado por algún punto. Pero en Fórmula 1 cualquier error o roce puede costar caro.
Es importante recordar, a su vez, que Carlos Sainz fue víctima de una durísima sanción de 10 segundos en Zandvoort por un incidente con Liam Lawson en el que el principal culpable fue el neozelandés. El español no levanta cabeza y en un fin de semana feliz por su podio en la sprint del Circuito de Las Américas vuelve a acabar derrumbado por este contratiempo en la carrera.
«Venía muy rápido desde el principio», dice Carlos Sainz
Claro que las carreras tienen estas cosas, pero esta vez la suerte no acompañó a Sainz. El madrileño se pasó un poco en la frenada mientras intentaba ganar espacio, y Antonelli giró justo en ese instante. El toque fue inevitable: la parte delantera del Williams dañó la trasera del Mercedes, y Carlos no pudo continuar.
«Lo siento, giró justo hacia mí”, comentó por radio el piloto español, visiblemente frustrado. Desde el otro lado, Antonelli mostró su enfado y no dudó en quejarse. «Es un idiota, me echó fuera”, exclamó con rabia por el intercomunicador.
«La verdad es que una pena, porque venía muy rápido desde el principio de carrera, creo que iba más rápido que los dos Mercedes de delante», dijo el piloto madrileño nada más bajarse del coche. «Había hecho un adelantamiento muy parecido a Bearman a principio de carrera, entonces luego de intentar con Kimi, Kimi me ha sorprendido».
«Antonelli ha empezado a cerrar la puerta poco a poco»
«No sé si crea que no me ha visto y ha empezado a cerrar la puerta poco a poco y cuando ya he visto que era cerrado o que no me había visto es cuando he bloqueado el neumático de adelante y nos hemos tocado», resumía, dando su versión y que no esperaba la reacción del italiano.
«Un incidente que parece feo desde fuera, pero luego desde dentro, sinceramente, ha sido un incidente que en cualquier momento podría pasar», mantenía Carlos Sainz.
Desde fuera puede parecer que la culpa es mía. Pero cuando intenté el mismo adelantamiento a Bearman, él no me cerró tanto la puerta como Antonelli. Por eso creo que la responsabilidad puede estar repartida entre los dos».
Sobre una posible sanción por parte de los comisarios, Sainz admitió que era algo que podía suceder. «Dependerá de cómo interpreten la acción. Desde fuera puede parecer que la culpa es mía, y acepto que bloqueé el neumático y que, al final, eso provocó el toque. Pero cuando intenté el mismo adelantamiento a Bearman, él no me cerró tanto la puerta como Antonelli. Por eso creo que la responsabilidad puede estar repartida entre los dos. Ya veremos qué deciden”, cerró el madrileño.