El Real Madrid de Xabi Alonso vuelve a convencer. Después de un mes de noviembre nefasto, horrible y preocupante, el conjunto blanco se adentraba en diciembre con michas dudas y muchas preguntas en el horizonte. No había respuestas posibles, y es que la imagen del equipo era muy preocupante, tras empatar merecidamente ante Rayo Vallecano, Elche y Girona. El cuadro madridista llegaba a San Mamés con la necesidad de puntuar de 3, pero además, de hacerlo con buenas sensaciones después de los malos resultados y la pobre imagen que dio el Real Madrid en los anteriores encuentros.
Dicho y hecho. El Real Madrid bailó al Athletic Club en La Catedral de principio a fin, y redondeó la noche con un 0-3 en San Mamés, gracias a un doblete de golazos de Kylian Mbappé y un tanto de Camavinga de cabeza. Pero todo ello no se entendería sin la dirección del equipo del técnico tolosarra y del planteamiento del mismo. Xabi Alonso volvió a salir con cuatro centrocampistas de inicio, como suele hacer en los días grandes, pero esta vez el suplente fue Arda Güler, quien no cuajó su mejor encuentro en el partido anterior en Montilivi, ante el Girona. En San Mamés, Xabi salió con un doble pivote formado por Tchouaméni y Camavinga, y a su vez, con dos centrocampistas más, como son Jude Bellingham -quien jugó con más libertad-, y Fede Valverde -que actuó tirado a la banda derecha, cerca de Trent-.
La jugada le salió perfecta a Xabi Alonso, porque desde el centro del campo, dominó el encuentro y sometió al Athletic Club. En ataque, el factor diferencial nuevamente fue Kylian Mbappé, quien se fabricó dos golazos para poner tierra de por medio y darle un triunfo sensacional al Real Madrid en Bilbao. Además, suya fue también la asistencia del 0-2 para Camavinga, tras una jugada colectiva brillante, en la que el equipo de Xabi movió la pelota de izquierda a derecha, y acabó con un centro preciso de Trent al segundo palo para que el francés se la diese de cabeza a su otro compatriota francés.
San Mamés marca el camino
Además, en el encuentro de San Mamés, se volvió a ver a ese Madrid de principios de temporada, que mordía, que iba a la presión, que jugaba la pelota rápido y con precisión, y que sabía lo que tenía que hacer en cada momento del partido. Sin balón, los pupilos de Xabi estuvieron sobresalientes. La defensa empujó hacia adelante, lo que hizo que las demás líneas fuese a la presión y ocupase los espacios necesarios e idóneos. Todos corrieron a la vez, fueron sólidos y mostraron el acierto adecuado para superar a un rival siempre complicado y exigente como es el Athletic Club. Por ello, el técnico tolosarra se mostró satisfecho nada más acabar el encuentro, en la sala de prensa del estadio de San Mamés.
«Era un partido importante. Creo que el equipo ha hecho un partido muy completo. Ha sido el encuentro más redondo que hemos hecho en un estadio exigente y en un momento importante», dijo el vasco. «El equipo ha salido a ganar el partido con mucha intensidad y con muy buen ritmo. Era un momento importante tras tres empates fuera de casa. El domingo volvemos al Bernabéu», afirmó el tolosarra. Los últimos partidos habían agravado la ‘crisis’ de resultados y de juego en Chamartín, por lo que en Bilbao, el Madrid tomó aire y oxígeno, y se situó a un punto del FC Barcelona en la tabla de clasificación de LaLiga.
Para Xabi Alonso, cada bloque de partidos es el más importante. Noviembre no fue un buen mes -solo se salvó el día del Olympiaco en Atenas– porque los pinchazos en forma de empates hicieron que el equipo cediese el liderato de forma incomprensible y ante rivales que presuntamente son inferiores al elenco madridista, pero que los de Xabi no lo demostraron. El verde manda y el Madrid no fue capaz de derribar los bloques bajos tanto de Rayo, Elche y Girona. Sin embargo, la temporada es larga y Alonso sabía que el equipo iba a reaccionar, tal y como aseguró en la sala de prensa del estadio del Olympiacos, en Champions.
Xabi Alonso, en busca de la regularidad
Así las cosas, el Real Madrid ha alejado los fantasmas de los últimos partidos y el ‘rock and roll’ parece haber llegado. Ahora, la misión del entrenador vasco es prolongar esas buenas sensaciones y ese gran encuentro en cuanto a constancia y regularidad. Es importante que el Real Madrid tome el partido ante los leones como el modelo a seguir en cada encuentro, porque la calidad en los jugadores es evidente, pero no siempre sale el equipo con la actitud necesaria. El pasado miércoles, los pupilos de Xabi Alonso salieron con la actitud correcta, con las ganas de ganar y con el hambre de conseguir los 3 puntos, que quizá ante Rayo, Elche y Girona, no parecían tener.
Por lo tanto, el Real Madrid de Xabi Alonso está más vivo que nunca, y ahora se centra ya en los partidos que quedan hasta final de año, para acabar el 2025 de la mejor manera posible. El equipo blanco se enfrentará ante Celta (domingo 7, estadio Santiago Bernabéu, 21:00 horas), Manchester City (miércoles 10, estadio Santiago Bernabéu, 21:00 horas), Alavés (domingo 14, Mendizorroza, 21:00 horas) y Sevilla (sábado 20, estadio Santiago Bernabéu, 21:00 horas). Además, también faltaría el encuentro de Copa del Rey por determinar, donde el Madrid conocerá a su rival en el sorteo de este próximo martes. Así las cosas, el Real Madrid de Xabi Alonso está 2º en Liga -a 1 punto del Barça- y en el top 8 de la Champions, con altas opciones de clasificarse de forma directa hacia los octavos de final de la máxima competición continental, por lo que en el club se respira optimismo y tranquilidad con Xabi Alonso, ya que consideran que el tolosarra está haciendo las cosas de manera positiva, y de que puede devolver al equipo a lo más alto. En San Mamés, comenzó la resurrección.