De Andrea Kimi Antonelli se sabe que el chico es un prodigio al volante y que Mercedes, especialmente Toto Wolff, el director de la escudería de la estrella, quiere hacer de él el nuevo Max Verstappen. Casi nada. Desde el pasado 14 de marzo, en el GP de Australia, en Melbourne, también se sabe que el chaval de 18 años sabe cómo sobreponerse a un bofetón como el que se llevó en la primera clasificación del año.
Andrea Kimi Antonelli ha superado todas las expectativas hasta ahora
Entonces, no pudo el que no pudo pasar de la primera eliminatoria de la cronometrada (Q1), cosa que le mandó a las catacumbas de la parrilla con vistas a la carrera. Una muy mala noticia y aún peor que eso si tenemos en cuenta que fue el único de los cuatro novatos que no pasó ese primer corte, a pesar de conducir el coche más competitivo de todos ellos.
Sin embargo, al día siguiente, en una jornada atormentada, y nunca mejor dicho, la nueva esperanza italiana encontró una rendija por la que meter el morro, un agujerito que le llevó a culebrear por entre el pelotón y a sortear todos los muros que abrazan el circuito de Albert Park, avanzando hasta llegar al cuarto lugar (finalmente quinto por una sanción).
Como tal, hacía una década que nadie hacía un debut tan prolífico como el de Antonelli en Australia. Con esta cuarta-quinta plaza supera el 5º puesto de Felipe Nasr de 2015 y en la historia reciente de la Fórmula 1 solo hay tres debuts mejores que el del italiano. Kevin Magnussen en 2014 y Jacques Villeneuve en 1996 terminaron segundos en su primera carrera en F1. Por su lado, Lewis Hamilton terminó tercero en Australia 2007 y saboreó lo que es subirse al podio en su primera carrera en el Gran Circo.
Los récords de Antonelli en Australia y Japón
A partir de ahí todo sobre ruedas, y nunca mejor dicho. La machada de Antonelli es una bocanada de aire para Wolff, que se la jugó al apostar por él después de la salida de Hamilton a Ferrari y ante las reservas de no pocos miembros de Mercedes, que consideraban precipitada su promoción.
Durante el último invierno, el joven se ha pegado un atracón de kilómetros al volante de monoplazas de un par de años atrás, en unos entrenamientos que impresionaron a muchos de los allí presentes. Era habitual verle dando vueltas en Silverstone, donde se pasó más de un día entero practicando la aproximación al garaje y el cambio de ruedas, una maniobra que al principio se le encallaba.
Lo que también destacó por encima de todo es la capacidad de leer carreras como la de Japón en el momento más complicado. Cuando empezó a llover y se salieron los McLaren por delante, Antonelli fue de los primeros en entrar a cambiar neumáticos y en ese movimiento, donde equipos como Ferrari perdieron un mundo, escaló muchas posiciones.
Y el papel de Antonelli cobra más peso cuando se ve al resto de rookies. Aparte del italiano, probablemente solo Oliver Bearman y Hadjar estarán en posiciones constantes de puntos en las próximas carreras, al menos como se ha podido ver en estas primeras cuatro carreras del año.
Una madurez poco antes vista a sus 18 años
Lo que está haciendo Antonelli, además, es historia dentro de la escudería Mercedes que apostó en grande por este joven, que ha cumplido. Sin proponérselo, según declaró el piloto, logró establecer el mejor registro en carrera en Japón cuando en la vuelta número 50 detuvo el cronómetro en 1:30:965, aprovechando el aire limpio que le concedió rodar adelante con neumáticos medios todavía en un nivel óptimo de rendimiento. Se sorprendió cuando ningún otro piloto pudo bajar del 1:31 en las vueltas que restaron de la carrera.
Por tanto, y con tan sólo 18 años, Kimi Antonelli se encuentra ante uno de los mayores desafíos de su carrera en la cúspide del automovilismo… y lo está haciendo con una madurez poco antes vista. Desde su debut, el de Bolonia ha logrado sumar puntos en cada una de las cuatro carreras que se han disputado hasta la fecha.
Tanto es así que estos resultados colocan a Antonelli en el sexto puesto del Campeonato de Pilotos con 30 puntos, inmediatamente por delante de Hamilton y su Ferrari y apenas dos unidades por debajo de Leclerc. Con esos 30 puntos ha ayudado a que Mercedes, gracias también al buen desempeño de George Russell, ocupe el segundo lugar en la clasificación de constructores.