El Real Madrid vive unas últimas e intensa horas de mercado para el Mundial de Clubes. El conjunto blanco tiene abierta la negociación por un Álvaro Carreras que muchos dan por perdido para el torneo y que otros creen que se resolverá en estas últimas horas ante la necesidad urgente por parte del club que esté bajo las órdenes de Xabi Alonso para el Mundial. Comienza la cuenta atrás para saber si vestirá de blanco o habrá que esperar hasta el mes de julio.
Últimas 24 horas de mercado
Con la celebración del Mundial se ha creado una ventana especial de inscripciones para todos los clubes participantes con el fin de que los nuevos jugadores puedan competir en la cita mundialista. Este periodo de inscripción extraordinario estará abierto del 1 al 10 de junio, es decir, quedan 24 horas para que el Real Madrid pueda cerrar alguna incorporación más para el torneo.
En esta ventana especial el conjunto blanco ha cerrado la incorporación del central Dean Huijsen que llegaba desde el Bournemouth inglés y es jugador blanco desde el 1 de junio. También lo es un Alexander-Arnold que acababa contrato y al que el Liverpool dejó salir antes de tiempo a cambio de una cantidad que ronda los 5-10 millones de euros. Ahora, el conjunto blanco está pendiente de cerrar las incorporaciones de Álvaro Carreras, que ya ha viajado con Benfica a Estados Unidos, y Franco Mastantuono que estaría presionando para jugar el torneo con el Real Madrid, pero al que, en principio, se espera para el mes de agosto.
Imposible para el Mundial
En las últimas horas, tras viajar a Estados Unidos con el Benfica, se ha apuntado que el conjunto luso lo habría inscrito para el Mundial imposibilitando así que pueda ya jugar de forma legal con el Real Madrid durante el torneo. Concretamente lo ha anunciado Josep Pedrerol en El Chiringuito donde ha apuntado que «Álvaro Carreras está descartado para el Mundial de Clubes. Ha sido registrado oficialmente por el Benfica, por lo que es ilegal que juegue la CWC con el Real Madrid». Según el afamado periodista el Real Madrid no renuncia al jugador, pero lo firmará una vez finalice el Mundial en la ventana normal de fichajes que comienza el 1 de julio.
Una operación dilatada en el tiempo
Las negociaciones con el Benfica no están siendo nada sencillas lo que está retrasando un fichaje que tanto Real Madrid como jugador tienen claro. El conjunto portugués se ha mostrado como un hueso duro de roer y no ha cedido ni un milímetro ante un conjunto blanco que quería bajar el coste de la operación. La cláusula de rescisión del jugador está fijada en 50 millones y el club madrileño empezó la puja en 35. En las últimas horas se sabe que ha llegado a las 40, pero sigue pareciendo insuficiente a un Benfica que quiere al menos 48 millones recibiendo así una compensación por dejarlo ir de cara al Mundial.
El jugador, que ya volvió a trabajar el pasado martes con normalidad ante la demora en su fichaje, viajó en la noche de este domingo con el equipo a la espera de que todo se solucione. En el Real Madrid se sigue confiando en que la operación se llevará a cabo y estará bajo las órdenes de Xabi Alonso en los próximos días, pero todo se ha complicado de tal manera que el fichaje podría retrasarse un mes más si de verdad el conjunto portugués ya ha inscrito al jugador en el torneo.