Jude Bellingham jugó algo más retraso de lo que venía haciendo y escorado ligeramente a la derecha, pero con libertad para moverse con el campo, siempre con rigor y siempre dejándose hasta la última gota. Completó uno de sus mejores partidos de toda la temporada, precisamente un día después de que se confirmara que pasará por quirófano tras el Mundial y estará tres meses de baja las molestias que arrastra en el hombro.
Xabi Alonso convierte a Bellingham
Xabi Alonso ya lo avisó el día de su presentación, ve a Bellingham como centrocampista puro, y ahí es donde explotó el inglés. El sistema planteado por entrenador vasco con 3 centrales y dos carrileros que corren toda la banda, permitió al inglés no tener que abarcar tanto campo, como venía haciendo habitualmente. Junto con un Güler en la creación y con Valverde como escudero, el inglés hizo suyo en centro del campo, por potencia, por calidad, por elegancia.
Mostró unas cualidades que se las vimos en su primera temporada, no tanto en el trascurso de este última, con un manejo y una conducción de balón que mostraba superioridad, se zafaba de sus rivales como el mejor niño en un patio de colegio, y tenía espacios para tomar la mejor decisión.
Bellingham abre la lata
Después de una primera media hora del Real Madrid donde fue infinitamente superior a su rival, los austriacos dieron un paso al frente, a sabiendas de que en el otro partido, el Al-Hilal ganaba y estaban fuera. En uno de esos ataques con más corazón que fútbol, los de Xabi Alonso robaron, y en tres cuartas partes del campo defensivo del Real Madrid, recibió la pelota el inglés, levantó la cabeza y filtró un pase por el medio para dejar a Vinicius en un dos para dos en el que le acompañaba Gonzalo, una superioridad que el brasileño resolvió sobrado de aptitudes, pero el que se lo había dejado en bandeja fue Bellingham con el increíble pase.
Más incidencia en el juego
Xabi Alonso sigue dándole vueltas al once y al sistema que quiere instaurar a sus jugadores. El de ayer, con Tchouaméni entre los centrales, podría parecer a priori defensivo, pero nada más lejos de la realidad, fue un equipo ofensivo, más compacto, más presionarte, más dominador, lo que permitía al internacional inglés moverse como le daba la gana por todo el centro, más escorado a la banda derecha, ya que Valverde estaba más centrado –en ataque por delante de Güler, en defensa por detrás del turco-, y con muchas opciones para jugar el balón, ya que los carrileros abrían el campo los delanteros estaban más centrados y los dos acompañantes en el medio, creaban la superioridad para que Bellingham tomara siempre la mejor decisión.
Operación del hombro
Ya se sabía pero ahora es oficial. Jude Bellimgham pasará por el quirófano después del Mundial de Clubes: tras una temporada y media esquivando la operación de hombro, el futbolista ha dicho basta y tendrá que someterse a una operación que le dejará tres meses de baja. No volverá a vestirse de blanco, hasta el próximo mes de octubre, así que es de esperar que no recupere su mejor estado de forma hasta el mes de noviembre. Visto cuál puede ser su rol y su incidencia en el Real Madrid, es una baja importante, pero de momento, parece que Xabi Alonso va a tener a toda la plantilla muy enchufada a lo largo de la temporada.
Jude Bellingham fue de lo mejor de un Real Madrid que jugó una primera media hora de partido como hacía años que no se le veía, solidario, veloz como un rayo, y fuerte en defensa. El inglés estaba lo suficiente liberado y con los suficientes apoyos para mostrar su mejor versión blanco.