Carlos Sainz sigue con su cruzada en Williams, con otro fin de semana donde los errores se cebaron con el madrileño, al contrario de su compañero de equipo Alex Albon, que logró acabar la carrera en sexta posición por delante de un Hamilton que había volado hasta la séptima plaza. El propio equipo, reconoció su error al final de carrera.
Carlos Sainz sigue con el gafe
Está siendo una mala temporada para Carlos Sainz con Williams. El piloto madrileño volvió a sufrir un sinfín de percances que arruinaron su carrera. Después de una carrera al sprint buena, con grandes sensaciones, toda hacía presagiar que podríamos ver al madrileño luchar por los puestos punteros de la carrera, pero todo se empezó a torcer en la clasificación del sábado.
«El error es ayer la clasificación que nos ha costado el resto del fin de semana después de haber sido muy fuerte en el sprint, un poco de arrepentimiento de cambiar el set-up del coche para la clasificación y habernos equivocado, ir en la dirección incorrecta y con ello, todo lo que conlleva».
Error en la configuración para el domingo
Carlos Sainz insistía después de la carrera en los errores cometidos después del sprint que provocaron la mala clasificación. Dado el mal resultado (acabó en el puesto 15 sin llegar a la Q3), decidieron salir desde el pit lane al detectar un problema en el coche. Esto les permitió cambiar el set up del FW47, y ahí es donde se volvió a cometer otro error que le arruinaría cualquier opción de poder remontar a posiciones de puntos.
“Nos equivocamos en la dirección que fuimos. Luego vimos una anomalías en el coche que, clasificando el 15, decidimos salir desde el pit lane para cambiarla, lo que nos permitía probar un ala de mojado a ver si sonaba la flauta, pero no salió bien, como decimos en España, los inventos con gaseosa”.
Williams vuelve a fallar en carrera
Pero faltaba la puntilla, faltaba un error más de Williams, y esta vez fue durante la carrera, cuando había que tomar la decisión de cambiar de los neumáticos intermedios a los neumáticos de seco una vez que se había secado la pista. La idea era parar a Albon y al madrileño en la misma vuelta, pero no tenían los dos juegos listos, por lo que Sainz tuvo que dar una vuelta más, ya que se priorizó a Albon, lógicamente, porque iba por delante.
Una vez que logró entrar en boxes, la parada fue mala. El mecánico encargado de levantar el coche no estaba colocado cuando encajó el monoplaza para el cambio de gomas. Y no fue lo único, ya que un mal ajuste del alerón delantero descompensó el coche hasta su segunda parada.
Para rematar esta primera parada, Carlos Sainz se encontró con atasco en el pit lane y tuvo que retrasar la salida una vez los mecánicos habían completado la parada, como obliga el reglamente, por lo que, cuando se reincorporó a pista, ocupaba la última plaza de la carrera.
El propio equipo se disculpaba con Sainz al término de carrera, por radio, reconociendo que habían fallado y que debían hacer algunos ajustes. El propio Carlos también se disculpó por la mala configuración del coche sobre mojado, pero los ingenieros admitieron su error al estar de acuerdo con los reglajes del monoplaza.
En resumen, un nuevo fin de semana para el olvido, sobre todo para Carlos Sainz, que parece llevarse todo lo malo esta temporada, porque Albon volvió a cumplir, volvió a destacar, acabando sexto en la carrera final, llevándose lo positivo del fin de semana de un Williams con muchas luces y con muchas sombras, que siempre parece perjudicar al mismo piloto.
