El canterano volvió a tener minutos ante el Celta, cuando el equipo ya iba por detrás en el marcador, cuando buscaba la épica, y, como es evidente, tuvo la oportunidad más clara del equipo. El motivo es que, cuando tienes a un delantero en el campo, si el equipo no tira a puerta, lo lógico es que, si hay alguna oportunidad, sea él quien la tenga. Igual que una jugada defensiva, habitualmente la protagoniza un defensa, las jugadas de gol, habitualmente, las protagonizan los delanteros. Una máxima del fútbol que el Real Madrid en general, y Xabi Alonso en particular, no parecen compartir.
Los problemas del 9
Ya se ha demostrado en muchos partidos que el Real Madrid tiene un problema en la creación, pero también lo tiene en ataque. Solo Mbappé marca goles, porque es uno de los elegidos en este deporte, pero ni con esas le vale al equipo blanco para sacar los partidos adelante. Ayer ante el Celta, el equipo blanco volvió a tener los problemas que ha tenido en otros partidos, no era capaz de generar ocasiones de gol Con una defensa bien cerrada, sin amenaza por la derecha, y sin un delantero centro que ponga en alerta a las defensas rivales, todo el ataque blanco se monopoliza en la banda izquierda, y claro, todo está condicionado a que Vinicius (que no está) y a que Mbappé, resuelvan gracias a su calidad individual.
El simple hecho de tener un 9 en el campo, un futbolista de referencia, que juegue de espaldas, que centre a los centrales, que genere amenaza, ofrece más alternativas a sus compañeros, ya sea generando espacios o siendo una opción directa para el gol.
Gonzalo roza el empate
El Real Madrid decidió apretar una vez que iba por detrás en el marcador y con un hombre menos, y Xabi Alonso sacó a su delantero, a Gonzalo, el que le salvó en el Mundial de Clubes, al que ahora empieza a dar algo de bola después de no ponerle en casi toda la temporada. Y demostró que, con un delantero, quizá las cosas puedan ser diferentes. Porque el equipo, con uno menos, apenas pudo generar ocasiones, la única, un remate de Gonzalo que golpeó el palo izquierdo de la portería de izquierda, por fuera.
Viendo los problemas que tiene el Real Madrid para marcar gol (Vinicius debería ser el escudero de Mbappé y no marca desde el 1 de octubre), y viendo los problemas que tiene el equipo para generar opciones de gol, es incomprensible que su delantero no tenga más minutos sobre el terreno de juego. Porque cuando ha pisado el césped, el equipo ha generado más peligro. Es simple, como hemos dicho, el portero para, los defensas defienden, y los delanteros marcan. Otros pueden hacer estas funciones, obvio, esto es fútbol, pero los roles de cada uno, las posiciones, son clave para que un equipo funciona. Si no juegan con delantero, lo normal es que al equipo le falte gol.
Un problema de Xabi Alonso… y del Real Madrid
Porque Xabi Alonso no tiene más que tirar de un canterano, que lo pongo o no, es debatible, pero que el Real Madrid lleva años sin reforzar esta posición, no tiene sentido. En la última Champions League, el equipo no tenía un delantero centro como tal, de titular, pero sí en el banquillo: Joselu marcó ese año, saliendo casi siempre desde el banco, 18 tantos en todas las competiciones, siendo decisivo en las semifinales de la Liga de Campeones ante el Bayern. Vale que no tengas un 9 de inicio, con Mbappé y Vinicius te debería dar en muchos partidos, pero hay que tener alternativas, y en el caso del Real Madrid, llevan años sin ofrecérselas al entrenador.
Y partido a partido, los problemas siguen siendo los mismo, y las soluciones propuestas, las mismas. Ahora, la primera es sacar a un jugador que lleva casi un año sin marcar un gol en Liga.
