El Santiago Bernabéu se está cansando de la actitud de sus jugadores, y en especial de Vinicius, y lo mostró con pitos, no fue tan sonada como las de antaño, pero si es el principio de algo que puede ir a más si el brasileño no se pone las pilas. Ayer tuvieron su efecto, sobre él y sobre el resto de los jugadores, pero es una clara advertencia de un público que está cansando de ver ciertas actitudes del jugador brasileño.
Vinicius, en el punto de mira
Quizá todo lo que esté pasando en el Real Madrid y alrededor de Vinicius acabe siendo algo positivo, pero por el momento, es la evidencia de un público cansado, un público que ha visto grandes estrellas a lo largo de su historia y que no están nada conformes con un Vinicius que sigue sin dar la talla, ni en ataque, ni en defensa. De lo primero, no se le puede negar que no para de intentarlo, de que lo busca constantemente. Y de lo segundo, tiene momentos, cuando parece que no le queda otra, pero sigue teniendo desconexiones que ayer encendieron al Bernabéu.
Porque cuando el equipo está en crisis, como la que atraviesa ahora, una que muchos de los futbolistas actuales, por no decir ninguno, nunca ha vivido, el público del Santiago Bernabéu exige lo único que es innegociable, la implicación y el trabajo de todos, y eso incluye, incluso más que el resto, a las estrellas del equipo. En el partido de ayer, el Real Madrid pasó de un juego alegre, de ir por delante en el marcador, a ir perdiendo, y en la segunda parte, hubo un momento de desconexión, de bajar los brazos, empezando por Vinicius y continuando por el resto de jugadores. Y ahí se empezaron a escuchar unos pitos que fueron a más con el paso de los minutos.
Reacción de Vinicius y de los jugadores
Esos pitos, esos reproches son el signo de una afición cansada, de los egos de las estrellas, del poco trabajo del equipo. Y hubo reacción: el equipo logró inclinar el campo hacia la portería contraria, peleo como hacía mucho que no lo hacía, y esa reacción, provocó a su vez la reacción positiva del público, que intentó alentar a los suyos para lograr un empate que finalmente no llegó.
Pero dio muestras de lo que quiere una ficción más allá de las victorias, que tarde o temprano llegarán, y no es otra cosa que la implicación de los jugadores, que se dejen el alma sobre el terreno de juego, que no den pie a que se ponga en duda su profesionalidad.
Doku vs. Vinicius
Quizá fue otra las cosas que más daño hizo ayer al jugador brasileño. Vinicius apenas le salen las cosas, lo intenta, lo busca, pero ha perdido chispa en su desborde. El claro ejemplo se veía en la otra diagonal del campo. La banda derecha del Real Madrid sufrió todo el partido a un Doku que fue una constante amenaza para el Real Madrid, con regates constante y un claro dominio de los espacios, algo así como lo que hacía Vini hace unos años y que ahora no le sale. Muchos siguen justificando sus actuaciones, argumentan que te puede ganar un partido en cualquier momento, y no les falta razón, lo que ocurre es que ese “cualquier momento”, ya no es habitual, es cada mucho.
Por es emotivo, si además de que no le salen las cosas, no ayuda lo que debiera en defensa, y mantiene actitudes antideportivas con contrarios, con árbitros, o con rivales, y si encima es parte directa del incendio que se ha generado en el club en el último mes y medio, llega un momento en que el público se manifiesta.
