El Real Madrid ganó en San Mamés al Athletic Club y vuelve a sonreír. La afición blanca necesitaba un partido así, con determinación, autoridad y solvencia, para regresar a la senda del triunfo a domicilio en Liga, después de los pinchazos ante el Rayo Vallecano, Elche y Girona. El conjunto merengue dio un golpe encima de la mesa en La Catedral, y derrotó por 0-3 a un siempre complicado Athletic, gracias a un doblete majestuoso de Kylian Mbappé y a otro tanto de Camavinga. El protagonista del Real Madrid fue Mbappé, que anotó un doblete de golazos y se llevó el MVP del partido, pero las buenas noticias se acumulan en la casa blanca y Xabi Alonso sale reforzado de San Mamés por muchos motivos.
El técnico tolosarra sabía que se la jugaba ante el Athletic. No era un partido de vida o muerte, pero sí que era una «final» anticipada con mucho que decir, ante la mala imagen de los últimos encuentros y la poco convicción con la que los jugadores salían al campo. Xabi Alonso tiró de su once de gala, dejó fuera a Arda Güler de inicio, y armó un bloque sólido, compacto y con vértigo, para dominar en todas las zonas del terreno de juego. Era importante que los futbolistas saliesen con el cuchillo entre los dientes para ir a por los 3 puntos, y así fue.
El entrenador donostiarra acertó de lleno en el planteamiento del partido, con Tchouaméni, Camavinga, Bellingham y Valverde en el centro del campo. El doble pivote de los franceses fue la fiabilidad de Xabi -a pesar de que Camavinga acabó el encuentro antes de tiempo y tuvo que salir lesionado por Arda-. Bellingham fue de los jugadores que más corrieron y presionaron sin balón, junto a Vinicius y Mbappé, y Valverde ayudó a Arnold para que el inglés pudiese desplegar todo su fúitbol ofensivo. Trent tiene un guante en el pie, ya que le dio la asistencia a Mbappé en el 0-1, y participó en el 0-2 de Camavinga colgando un balón exquisito al segundo palo a Mbappé para que este se la pusiese a Camavinga. Sin embargo, el peaje que tuvo que pagar el Msdrid fue muy alto, ya que Trent Alexander-Arnold, que estaba cuajando su mejor partido como madridista, se marchó lesionado del aductor.
En defensa, Xabi Alonso también volvió a armar a su defensa. Con la lesión de Huijsen, la pareja de centrales fue nuevamente Éder Militao y Antonio Rüdiger. Ambos cuajaron un gran encuentro, al igual que Álvaro Carreras y Trent. Pero sobre todo, hay que resaltar a Thibaut Courtois, que salvó nuevamente a los suyos con dos paradas sobrehumanas. Todo le salió perfecto al Madrid de Xabi Alonso, que se levantó en un escenario que siempre impone, para dejar atrás la mala racha y los tres pinchazos consecutivos en un mes horrible como ha sido noviembre. El mes de diciembre ha comenzado de manera inmejorable para el equipo, y el entrenados vasco confía en mantener la dinámica de juego y de resultados en los próximos cuatro encuentros que quedan hasta que acabe el año: Celta, Manchester City, Alavés y Sevilla.
Xabi Alonso busca la consistencia
«Era un partido importante. Creo que el equipo ha hecho un partido muy completo. Ha sido el encuentro más redondo que hemos hecho en un estadio exigente y en un momento importante», dijo el técnico tolosarra tras acabar el encuentro. «El equipo ha salido a ganar el partido con mucha intensidad y con muy buen ritmo. Era un momento importante tras tres empates fuera de casa. El domingo volvemos al Bernabéu», aseguró, mostrándose satisfecho tras el triunfo. «Lo de hoy es lo de hoy. Vamos partido a partido. Tras empatar en Girona era importante. Mañana ya pensamos en el Celta. El calendario es exigente y no te permite darle muchas vueltas», sentenció.
Así las cosas, el Real Madrid de Xabi Alonso ha vuelto a resurgir ante un rival importante y en un estadio en el que siempre es complicado ganar. El tolosarra consiguió que sus pupilos presionasen, corriesen y jugasen con las directrices que siempre ha querido y que les había transmitido desde el primer día, y ahora parece que este triunfo podría suponer un punto de inflexión para un equipo que hace semanas estaba contra las cuerdas, y ahora, a tan solo un punto del liderato.
